Jesús, nuestro Señor, mientras estuvo en este mundo, pregonó la paz y la defendió de todos los que estaban en contra de ellos. Jesús, al igual que la paz, nos alumbra el camino en el cual encontraremos la fuente de la felicidad. Mientras, que lo contrario de ella, son las guerras; y esos que la promulgan ofrecen un camino de oscuridad, que conduce a la destrucción de la existencia de toda especie viviente. Decide entonces, cuál camino recorrer, si el de la paz o el de la guerra.
Con el primero, te encontrarás con enemigos poderosos económicamente; y a ellos los puedes vencer con las herramientas que te ofrece la paz, la justicia y el patriotismo. Con el segundo, te encontrarás con las mentes más perversas, malignas y degeneradas que te harán creer que sus mentiras son verdades y sus verdades son mentiras. Te ofrecerán las herramientas más modernas, costosas y poderosas creadas hasta hoy; y con ellas, puedes lograr la destrucción deseada en segundos, incluyendo la tuya.
Para elegir el camino de la paz, hay que tener un gran nivel de conciencia en pro de la humanidad y de toda especie viviente. Elegir el camino de la guerra solamente lo hacen las mentes más degeneradas, cuya intención es la destrucción. No olvides que al querer destruir la paz, estás creando la guerra interna que te extinguirá para siempre.
LA PAZ SOLAMENTE LA HACEN VALIENTES CONSTRUCTORES Y LA GUERRA COBARDES DESTRUCTORES (UBCh TV.).
Autores: Profa. Mabel Valiente
Prof. Carlos Pérez
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